Psicoterapia Para Adolescentes

Si observas cambios significativos en el estado de ánimo de tu hijo, un deterioro en su funcionamiento académico o social, una pérdida de interés en actividades previamente disfrutadas, cambios en los patrones de sueño o alimentación, aislamiento social o expresiones de angustia emocional persistente, puede ser indicativo de que podría beneficiarse de la psicoterapia. 

Sí, la confidencialidad es un componente fundamental de la relación terapéutica con los adolescentes. Los psicólogos están legalmente obligados a mantener la confidencialidad de la información compartida durante las sesiones, a menos que exista un riesgo inmediato para la seguridad del adolescente o de otros. Antes de comenzar el tratamiento, se establecerán límites y se discutirá la confidencialidad con el adolescente y sus padres para fomentar un entorno seguro y de confianza.

Algunas señales de que se siente cómodo pueden incluir una actitud abierta hacia la terapia, la voluntad de participar activamente, comparte sus pensamientos y sentimientos, y expresa confianza en el terapeuta. Sin embargo, también es normal que los adolescentes puedan mostrar cierta resistencia o inquietud al principio. Si tienes inquietudes sobre la relación terapéutica, habla abiertamente con tu adolescente y considera discutirlo con el terapeuta.